Die Ketama-Trommeln

Seguro que has oído hablar de los tambores de Ketama, sobre todo si te interesa el mundo del hachís y sus curiosas formas de ser elaborado.

Bueno, pues Ketama es una ciudad, que está en la provincia de Al Hoceima, en Marruecos. De allí vienen los tradicionales tambores de Ketama.

¿Y por qué se han hecho famosos? En realidad, en Marruecos lo son casi desde siempre, como instrumentos musicales tradicionales. El tema es que ahora ¡se usan para la producción de hachís!

Así que en esta zona de Marruecos el hachís se prepara a ritmo de los tambores de Ketama y, claro está, se ha convertido en un fenómeno mundial.

La Región de Ketama: Producción de Hachís en Marruecos

Visto en perspectiva, es como si todos los factores se hubieran unido para que los tambores de Ketama y el hachís se fusionaran de forma irresistible.

Para empezar, el uso de estos instrumentos es una técnica ancestral que solo se da en esta parte del mundo.

Casualidades de la vida, Ketama tiene una geografía perfecta para el cultivo de hachís, con extensos valles, cursos de agua y canales de irrigación. Las condiciones ambientales fomentan el uso de semillas índicas, que son conocidas por su dulzor y su densidad.

¿Consecuencia? ¡El hachís en Ketama crece estupendamente! Y el uso de los tambores de Ketama, además de ser uno de los sistemas de producción más originales del mundo, también es muy eficaz.

El proceso de elaboración del hachís en Ketama

El uso de los tambores de Ketama en Marruecos es una técnica en apariencia simple, pero que tiene detrás cultura, tradición y un arte sofisticado, que ha ido pasando de generación en generación.

El objetivo de este proceso es usar el tambor para extraer el polen en seco y luego trabajar con él según la calidad que se busque.

¿El resultado? Un hachís excepcional que se puede elaborar con bastante rapidez y que mantiene todas sus características naturales, ya que se basa en un proceso tradicional basado en la percusión:

• Primero se coloca el polen en un cubo corriente.
• Sobre él se pone una tela de nylon que debe estar lo más tensa posible.
• La tela va a servir de tamiz, ya que va a dejar pasar los tricomas que se acumulan en el cubo.
• Luego se coloca sobre esta tela hierba que se ha secado al sol.
• Se aplica una lona de plástico, de forma que la hierba queda entre esta lona y la tela.
• Los tambores de Ketama pasan a la acción. Se golpea la lona con un palo o una rama, con todo tipo de sinfonías.

Así que el hachís que usas con tu papel para fumar o tus conos para fumar favoritos, pese a su aparente tranquilidad, viene de uno de los procesos de elaboración más rítmicos y movidos del mundo.

¿Qué son los tambores de Ketama? ¿Cómo se utilizan?

La elaboración de los tambores de Ketama no deriva del cultivo de hachís. Su presencia tuvo lugar mucho antes, es una de las técnicas tradicionales más antiguas de la zona.

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La sucesión de generaciones que ha ido adoptando la preparación de estos tambores convierten la tarea en una auténtica tradición esencial de Ketama.

Los instrumentos, por descontado, pueden usarse para la elaboración de cualquier ritmo, no solo se tienen que vincular al hachís.

Están hechos a mano, a base de madera y cuero, con una forma y tamaño que pueden ser tan variables como queramos. Ahora bien, dado que su uso se relaciona sobre todo con el hachís, son lo bastante grandes como para que se produzca el frotamiento entre los cogollos de cannabis.

El uso de palos y ramas no tiene mucho misterio, al menos en cuanto a los materiales. Pero a pesar de ello, solo los más expertos en los tambores de Ketama saben identificar o preparar estos “accesorios” con las características perfectas para extraer el polen seco lo mejor posible.

La tradición de los tambores de Ketama

No se sabe a ciencia cierta cuándo aparecieron los tambores de Ketama por esta región de Marruecos. Parece que siempre estuvieron allí.

Hoy en día es una auténtica tradición cultural que, aunque por supuesto se relaciona con la producción de hachís, forma parte de la historia artística de esta zona.

Turistas de todo el mundo se sienten cautivados por el ritmo incesante de los tambores de Ketama, que se escuchan a diario por toda esta localidad de Al Hoceima.

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